[REVIEW] Aggretsuko: La cotidianidad del Kawaii metal
Sanrio es una empresa japonesa dedicada a crear personajes que destacan por su ternura para vender variados tipos de productos. Su mayor franquicia es Hello Kitty, la popular gatita sin boca que ya ganó su propio episodio en la serie documental The Toys That Made Us que cuenta la historia de diversas líneas juguetes y su impacto cultural. Aggretsuko es una nueva producción de Sanrio en sociedad con el servicio de streaming, mostrando cómo la empresa supo actualizarse con un anime que va más allá de la ternura.
Aggretsuko es la mezcla de las palabras «agressive» y «Retsuko», lo último es el nombre de su protagonista. Retsuko es una panda roja de 25 años que tiene una vida común, en el sentido más trágico de la palabra. La chica pasa por las más estresantes situaciones de lo cotidiano, de tener que transportarse en un metro lleno al acoso exhaustivo de sus jefes, y su válvula de escape es un karaoke donde encuentra paz cantando brutales canciones de heavy metal. La forma en como los problemas de Retsuko son presentados conforme la trama avanza y el contraste con sus momentos de furia son el gran atractivo de esa animación, que curiosamente tiende a agradar al público más adulto.
A pesar de estar pensada para niños, tanto por su parte visual como por la sencillez en el guión, la animación brilla al traducir de forma lúdica los principales problemas de la vida adulta, utilizando esos personajes lindos al servicio de la trama. La tragicomedia de las situaciones más absurdas no deja que la historia se tome demasiado en serio, pero da pistas claras de lo que quiere decir. No hay ejemplo mejor que la metáfora traída en la imagen de los jefes abusivos de Retsuko: un cerdo y una serpiente.
Traer temas tan distintos como el heavy metal y el chisme en la misma producción no es al azar. Desde el comienzo de la década un curioso estilo musical ha tenido cada vez más espacio en las listas de éxito japonesas: el Kawaii metal, que mezcla los agresivos instrumentales del heavy metal con características del pop japonés, con trajes combinando y bailes coreografiados. El mayor exponente de este estilo es la banda Babymetal, que ya tocó en grandes festivales con nombres como Guns N ‘Roses y Ozzy Osbourne.
Enfrentar las tendencias en su propia cultura para crear una nueva obra es el gran éxito de esta comedia. Sus episodios cortos llegan a dar la sensación de repetición por la forma en que los problemas de Retsuko se presentan y cómo ella lidia con todo, pero por tratarse de una historia continua, los dilemas acumulados se muestran cada vez más diversos (y más divertidos).
Un dato no menor es que esta producción es la primera producción original japonesa en Netflix que no es una serie de animación japonesa de ciencia ficción, acá no aparecen superhéroes, mundos distópicos o monstruos mutantes. Pero si tenemos uno de los temas que puede llegar a ser más tenebroso: la cotidianidad.
Aggretsuko está disponible en Netflix y ya tiene una segunda temporada garantizada para 2019.