Después de grandes éxitos como Sex and the City o Beverly Hills 90210, el productor Darren Star (Younger) ha decidido deleitar a sus fans con una nueva y brillante comedia, ambientada en la misma ciudad que constituye el telón de fondo de los últimos episodios de las aventuras de Carrie Bradshaw, una historia con sabor casi de cuento de hadas titulada Emily in Paris.
La serie original de Netflix cuenta la historia de Emily (Lily Collins), una chica empleada en marketing en Chicago, que se traslada a la capital francesa para una nueva oportunidad de negocio: su tarea será llevar el punto de vista americano a una empresa de publicidad parisina. Entre problemas con su jefe y colegas, preciosas amistades, amantes y diversión, comienza la confrontación entre dos culturas diferentes.
La serie, en sus diez episodios, transcurre por un camino muy trillado, con una trama bastante sencilla: la chica, llena de sueños que, a pesar de las dificultades que tiene por delante, consigue salirse con la suya y hacerse un nombre, es una trama que ya ha sido tratada una y otra vez.
Sin embargo, hay muchos factores que hacen que la visión de Emily in Paris sea extremadamente agradable, en primer lugar la protagonista: Lily Collins (Les Misérables) demuestra ser la elección correcta, logrando transmitir el torbellino de emociones y características positivas que distinguen la personalidad de la joven influencer, manteniendo también el grado adecuado de sensualidad en los momentos que lo requieren y mostrándose a la altura incluso en situaciones humorísticas.
Los momentos cómicos funcionan y hacen reír en más de una ocasión: la serie juega mucho con el concepto del extranjero que vive en un país del que no conoce los usos, costumbres y no habla el idioma, factor que generará simpáticos malentendidos, aunque en algunas circunstancias abuse de demasiados clichés y tópicos en la descripción del pueblo francés.
A pesar de algunos pequeños defectos mencionados anteriormente, Emily in Paris es un producto fresco y vivaz, tal vez no sea una obra maestra de su tipo, pero si es extremadamente agradable. Además, el pequeño número de episodios y su corta duración la convierten en una serie perfecta para la observación en forma de maratón.
¿Dónde ver Emily in Paris?
La serie está disponible en Netflix.