CUIDADO: Esta nota contiene spoilers del tercer episodio de la cuarta temporada
El tercer episodio de la cuarta y última temporada de Succession ha dejado a los espectadores sin aliento con un giro de trama que cambia el rumbo de la historia. La muerte repentina del patriarca Logan Roy (interpretado por Brian Cox) marca el comienzo de las inevitables consecuencias que sucederán en el futuro. En la escena final, la cámara se enfoca en el hijo de Logan, Kendall (Jeremy Strong), quien está visiblemente angustiado mientras observa el cuerpo de su padre siendo retirado del avión donde murió.
Sin embargo, el director Mark Mylod reveló en una entrevista con Variety que se filmaron muchas más escenas después de ese momento. En una versión inédita y más larga, Kendall se acerca a su automóvil y a su chofer mientras Roman regresa del avión, intercambiando una mirada antes de que ambos suban a sus respectivos autos y se alejen.
Mylod explicó que mientras los autos se alejaban, la cámara se centraba en la ambulancia, que también se alejaba, dejando una pista vacía. Según el director, esta escena fue «muy poderosa».
Además, Jeremy Strong interpretó varias versiones de la misma escena para que los productores pudieran decidir cuánto emocionalismo querían mostrar en el montaje final. En algunas tomas, el personaje de Strong estaba emocionalmente devastado, mientras que en otras se mostraba más impasible. Al final, se optó por la versión más impasible para lograr el equilibrio adecuado.