The Following: El caballo Ingles del drama policial

The Following es una serie estadounidense estrenada por FOX en el año 2013. Es protagonizada por Kevin Bacon y el excelente James Purefoy, tiene como tema la adoración y seguimiento que muchas personas tienen a ciertos “lideres” espirituales o emocionales. Y hasta que punto uno está dispuesto a trastocar sus valores éticos y cambiar su forma de ser por pertenecer a algo y seguir a un “líder” o seguir sus ideales, por muy psicópatas que estos sean.

Si queríamos una serie de suspenso, con muchos crímenes y muertos nos hubiéramos quedado con The Killing solamente, o sino nos conformábamos con True Detective o Broadchurch, pero The Following es mucho mas que eso, posee un tema de fondo rico en tramas y conflictos, y sumamente interesante, pero la serie fue perdiendo su atractivo mayor después de la primera temporada. Esta no es una serie mas de asesinatos, y policías buscando a un culpable. Lograron armar una primera temporada notable, llena de giros dramáticos, sorpresas, suspenso e intensas muertes, y todo con un tema de fondo notable, que era la adoración extrema de ciertas personas con un ser, persona o ente poderoso emocionalmente que tiene la capacidad de mover masas. Gente necesitada de una guía emocional y espiritual que se entregaban a las manos de (en este caso) un líder máximo, que era capaz de manipular sus mentes lo necesario para hacerles hacer cualquier cosa. Hasta que punto esta fe ciega en alguien podía llegar a trastocar la ética y valores de las personas. El gran comediante George Carlin alguna vez dijo “Dile a la gente que hay un hombre invisible en el cielo que creó el universo y la vasta mayoría te creerá. Diles que la pintura está fresca y tendrán que tocarla para estar seguros” porque cuando la gente está indecisa, cuando no sabe lo que quiere, cuando no hay firmes convicciones en su vida, deben creer en algo. Algunos creen en Dios, otros en Buda, otros en Yoda y otros en Joe Carroll.

The Following supo interpretar de excelente forma la necesidad de las personas en creer en algo, y que hoy en día la gente no se traga todo. Necesita creer en cosas nuevas y distintas, y en este caso se muestra la ciega idolatría a un personaje psicópata, un personaje obsesionado con una mujer y dispuesto a hacer lo necesario por tenerla para el. La muerte es una salvación de nuestra perdición, una salvación del que solo algunos son elegidos por el salvador, por el líder. Después de la muerte comienza la vida, no viene el silencio ni el descanso, la muerte es nuestra liberación de lo terrenal para llegar al clímax espiritual, o al menos eso es lo que cree Joe Carroll. La muerte es un arte, y Joe se basa en los poemas de Edgard Allan Poe para sacrificar a sus victimas, especialmente a sus mujeres. El asesinar y destripar a las personas es un arte fino, minucioso y delicado para el que solo algunas personas están preparadas. Carroll crea un grupo de seguidores de su pensamiento y arma un plan tan excelente elaborado y pensado para armar una venganza contra Ryan Hardy, su antítesis. Hardy, es el policía, el bueno, el que en esta pasada se quedó con la chica, pero que también tiene sus defectos, y muchísimos. A veces el protagonista y antagonista son uno, son la misma persona que se confunden con sus aficiones personales antes que las del resto. Todo esto y mas se urde y construye en la primera temporada. Una primera temporada excelente, notable y sumamente recomendable.

Sin embargo, esto no continua en la segunda temporada. La segunda temporada es un bache constante de vueltas sobre la misma rueda, sobre los mismos conflictos, se transforma en historias predecibles, los personajes son sumamente obvios en sus comportamientos. Ryan Hardy ya no es novedad, los nuevos caen en traiciones repetitivas de la serie, ya sabes que no son buenos, que alguien va a traicionar, lo que en la primera temporada fueron sorpresas notables para la historia en la segunda temporada son chistes repetidos del cual ya sabes su final. Parte muy bien, pero rápidamente decae en sus conflictos, y la inclusión de nuevos personajes que en un principio parecen interesante, después de un par de capítulos, ya no lo son. Ya conocemos todas las tácticas dramáticas de esta serie, por lo que ya no generan el mismo pulso de antes. Y a mi parecer en un momento pierde ese enfoque de inseguridad de las personas, el tema de la idolatría a un ente mayor por parte de gente que no sabe que hacer con sus vidas, la locura y fanatismo al extremo de antes aquí se pierde, y cuando casi a mitad de la temporada se recupera, es sumamente forzado. Su final no genera un cierre de historia, sino que un aletargamiento impuesto a los sub conflictos para una tercera temporada. Personajes secundarios toman una importancia superflua en la construcción del tema e historia principal. Se nota que se fuerza la historia a una tercera temporada.

The Following es una excelente serie con una notable primera temporada. Excelente tratamiento y exposición de temas como el fanatismo a deidades y entidades religiosas de distinto tipo, o la relación de los psicópatas y sociópatas  con sus victimas. La muerte como un arte y los limites de valores que tienen las personas para sus propias inseguridades son tópicos muy interesantes de la serie, que los toca perfectamente en la primera temporada, pero que en su segunda temporada deja mucho que desear. A mi entender, debió haberse quedado solo en los 15 primeros capítulos, pese a que su segunda temporada no es mala, es muy menor comparada con la primera. Tiene momentos de excelente calidad dramática, pero son los menos. Es una temporada muy inestable y con un final demasiado exigido. Esperamos que la 3ra temporada que ya está confirmada, sea la ultima y sea al menos con un final digno.