Después de un gran impacto que incluso llegó a la Casa Blanca, las directoras Laura Ricciardi y Moira Demos están estudiando los pasos iniciales para una segunda temporada de Making a Murderer. Según consigna Variety.
La serie documental de Netflix presentó el caso de Steven Avery , acusado de violación en 1985, que resultó inocente en 2003 y fue nuevamente acusado de asesinato en 2005. El documental presenta una fuerte evidencia de que el crimen fue plantado por la policía del condado de Manitowoc para acusar a Avery.
«Desde nuestro punto de vista esta historia, obviamente, no acabó. Es la vida real, el caso aún está pendiente. No sabemos lo que puede suceder, estamos ansiosos. Nos gustaría continuar documentando como se presentan nuevas pruebas»
dijo Ricciardi en un evento en Nueva York.
De acuerdo con Stephen M. Glynn, abogado del caso, las directoras encontrarán difícil volver a Wisconsin, ya que muchos residentes del estado creen que el documental es injusto. Él dijo:
«Leer artículos que cuestionan nuestra integridad y voluntariamente nos acusan dejar constancia del documental es muy frustrante.»
La serie ha dividido a la opinión pública acerca de la posible inocencia o culpabilidad de Avery.
La inspiración para la serie documental vino de un informe publicado en 2005 sobre los errores cometidos en el primer caso de Avery y reformas en el sistema judicial de Estados Unidos. Los diez episodios están disponibles en Netflix.