The Girlfriend Experience: la novia por horas

La prostitución como institución ha perdido su origen, junto con la propia civilización moderna. Egipto, Grecia, Roma, todas las civilizaciones antiguas tienen evidencia de que el intercambio de sexo por compensación (ya sea en efectivo o en bienes) era común y se podía encontrar en cualquier lugar. En los tiempos modernos que vivimos, el término «prostitución» gana contornos ofensivos, casi limitativos, por lo que el universo contenido en esa palabra es parte de los bajos fondos de la sociedad actual. Todo el mundo sabe dónde encontrar esta experiencia, Internet ayuda considerablemente, pero aún sigue teniendo un velo de secreto. Es evidente que en los sectores más acomodados de la sociedad, el nivel (oferta y demanda) alcanza un «estado del arte» privado. No es sólo un servicio de sexo, sino un «arriendo de novia».

The Girlfriend Experience muestra precisamente este universo de la prostitución de elite. Mujeres de 20 años, hermosas, bien educadas (muchas de ellas con educación universitaria) que entran en los servicios de lujo, donde cada sesión cuesta una pequeña fortuna, pagada voluntariamente por los empresarios, directores generales, los magnates, los herederos o cualquier persona con un alto poder adquisitivo.

La serie está basada en la película homónima de Steven Soderbergh, pero tiene cambios significativos en el argumento de la película a la televisión. Por ejemplo, se cambia a Nueva York por Chicago. Sumamos también el ámbito empresarial, las crisis y los escándalos intrínsecos en ella… Pero se equivocan al pensar que la serie es sólo una cuestión de prostitución. De hecho, la serie trata de Christine Reade (interpretada por Riley Keough) y su descubrimiento, colapso y recuperación en este mundo controlado por los poderosos. Podemos dividir la trama de la temporada en 3 momentos:

Entrada
Se equivoca quien piensa que Christine (estudiante de derecho que entra a hacer su práctica a un reconocido bufete de abogados) entra en este mundo por necesidad o dificultad económica. El personaje principal se adentra a este mundo más por curiosidad, que finalmente conduce a la dominación; Christine ama tener contacto con el mundo de la prostitución de lujo y todas las ventajas que ello conlleva. Siempre bajo la cautelosas órdenes de su «proveedora de clientes», una especie de pimp.

Establecimiento
Después de establecerse y cortar lazos con su pimp, Christine crear su propio negocio. Todo culmina en las relaciones con los clientes, sus peculiaridades y la eterna tensión entre dos puntos a pasos de una colisión: su vida como practicante en la firma de abogados y su vida privada.

Reanudación
Recuperados los conflictos, Christine asume su rol de «dominatrix» y lleva su carrera al mundo en el que opera.

De hecho, Christine no es una persona «adorable». Siempre mantiene una distancia emocional de todo y de todos, llegando a ser fría y calculadora en medio de este torbellino hormonal y emocional. Christine suma conflictos a medida que van pasando los episodios, pero nunca decae en su intención de ofrecer un servicio de lujo para las personas que necesitan una palabra de aliento, una compañía fraterna o, simplemente, un momento de distracción.

En cuanto a la construcción de la atmósfera, la serie recuerda bastante a The Knick en aspectos visuales y banda sonora. A pesar de que ambos tienen la participación de Steven Soderbergh, las similitudes se detienen allí. El uso de la luz y la luz de fondo, saturada y con amarillos brillantes son bastante diferentes.

Al final, The Girlfriend Experience es un estudio más del personaje que del entorno en el que opera. Se trata de conseguir entender la compleja mente de Christine y sus motivaciones detrás de una capa de egoísmo y cinismo, dejando de fondo a la prostitución. Tiene sus defectos, sus problemas, pero Christine también merece ser acompañada.

La primera temporada de la serie puede ser vista completamente en FOX Play y en FOX1 por televisión.

https://youtu.be/MfmC4NrDMZY