El aprobado de «Young Sheldon»

Si hay algo a lo que tenemos miedo acá son a esas series derivadas o que están inspiradas en otras. Sabemos que hay excepciones a la regla, pero en la mayoría de los casos esos presentimientos se hacen reales con una serie que está condenada al fracaso desde el principio. Sinceramente esperaba algo totalmente desastroso con Young Sheldon, serie derivada de ese elefante blanco llamado The Big Bang Theory que ya está en el ocaso de su peak creativo. De verdad esperaba algo horrible de Young Sheldon… pero al ver algunos episodios me llevé una grata sorpresa.

Desde Warner Channel nos invitaron a ver los 3 primeros episodios de la serie que narra las aventuras de, como su título lo indica, el joven Sheldon Cooper (interpretado por Iain Armitage, Big Little Lies) y muestra su vida de genio superdotado en su natal Texas, de como tiene que lidiar con su familia, su educación y todo lo que conlleva la vida de un niño con n intelecto más avanzado que el resto.

Partamos por lo más visible: El registro audiovisual dista diametralmente de su serie de origen. Acá no hay risas grabadas y la forma en que está realizada recuerda un poco a una cruza entre The Middle y Malcolm, ocupando lugares reales. La mayor gracia de Young Sheldon es que mantiene la esencia del personaje y, además, podemos conocer un poco mejor la génesis de su comportamiento, sus actitudes, miedos y fortalezas. Los 3 primeros episodios tiene mucho de comedia pero también segmentos dedicados al drama más puro, haciendo que la serie juegue constantemente entre las situaciones hilarantes con un guión más adulto y jugado.

Hay algo en contra de la serie: Hay que ser un conocedor de su serie principal. Quiero decir, se puede ver Young Sheldon sin problemas si nunca viste The Big Bang Theory, pero se entienden de mejor manera las referencias del pequeño Sheldon sabiendo las trancas que tiene el Sheldon mayor (su manera de ser, su fobia al manejo o la relación con su hermana o abuela). Es algo parecido a Better Call Saul: puedes ver la serie, pero la disfrutas más si viste Breaking Bad y entiendes sus guiños.

Young Sheldon no es la gran serie que te dejará pensando, pero cumple su objetivo: es liviana, no requiere de un back up tan grande, se pasa rápido y, un punto importante, es un buen recuerdo de los años 90s.

Warner Channel presenta en noviembre los nuevos capítulos de Young Sheldon, la precuela de The Big Bang Theory que relata la infancia de «Shelly» y todo el proceso que lo convertirá en su particular versión adulta. Desde el 5 de noviembre, todos los domingos a las 21.00 horas.