El terrible experimento de la CIA en el que se basó ‘Stranger Things’

Stranger Things es una gran ciencia ficción de Netflix, especialmente cuando se trata del aterrador y misterioso Upside Down. Sin embargo, parece que la serie no sólo fue diseñada con la fértil imaginación de Matt y Ross Duffer.

La serie está basada en un experimento de la CIA que realmente existió. Bueno, los creadores de Stranger Things han intentado advertir de ello desde el lanzamiento de la producción.

«Queríamos elementos sobrenaturales unidos a la ciencia de alguna manera«, dijeron los desarrolladores de Rolling Stone en 2016.

Para ello, la primera temporada de Stranger Things contó con el experimento MK-Ultra. El proyecto fue dirigido por el Dr. Brenner y Eleven fue una de las conejillas de indias. Como se muestra en la serie, el científico hizo terribles experimentos con la madre del personaje, lo que resultó en los poderes de la niña.

Lo que se descubrió ahora es que en realidad existía un experimento con el nombre MK-Ultra. El proyecto de la vida real fue creado en 1953 en la CIA. Los estadounidenses querían desarrollar habilidades de control mental para tener una ventaja contra los rusos.

Se publicaron documentos secretos de la CIA, como revela Digital Spy, y se revelaron detalles sobre este experimento. Stranger Things tomó prestadas algunas ideas.

El programa comenzó con un grupo de voluntarios, pero pronto se convirtió en algo siniestro. Los conejillos de indias comenzaron a sufrir abuso mental y físico. Los participantes recibieron medicamentos psicodélicos y no podían dormir. Una de las operaciones del estudio incluso probó los efectos del LSD en un hombre que frecuentaba burdeles. La acción tuvo lugar en San Francisco y fue llevada a cabo por la CIA por medios ilícitos.

El proyecto, considerado muy peligroso, se terminó en 1965. El gobierno de Estados Unidos trató de destruir documentos, pero algunos se filtraron.

Otro experimento extraño en el que se basa la serie es el Proyecto Montauk. La curiosidad es que Stranger Things casi se llamó Montauk. Según información conspirativa, nunca confirmada, el gobierno de Estados Unidos llevó a cabo este proyecto en la década de 1980, en la región de Nueva York. El rumor es que un hombre llamado Alfred Bielek cavó un agujero en el hiperespacio y viajó de 1983 a 1943.

El hombre dice que él y su hermano tuvieron que destruir la máquina que abrió ese espacio en el tiempo para salvar al mundo. La historia es completamente extraña y no hay pruebas de que haya ocurrido. Pero, vale la pena señalar que sirvió de inspiración para Stranger Things.