The Crown: La vulnerable Reina Isabel II

Para las viudas y viudos de Downton Abbey, su sufrimiento ha terminado. Toda la liturgia que dicta las normas de la nobleza y de ese acento flemático que destaca en la monarquía se encuentran en The Crown. La nueva serie de Netflix (y la más costosa de la historia). Creado por Peter Morgan, que retrata la trayectoria de la Reina Isabel (Claire Foy) desde 1947, cuando ella está a punto de casarse con Felipe (Matt Smith, de Doctor Who).

Felipe renuncia a sus títulos de príncipe de Dinamarca y Grecia para asumir un apellido Inglés. En ese momento, todavía no se conocen, pero los sacrificios que hacen en el nombre del amor serán mucho mayores. La vida de la pareja estará guiada por la posición de sus obligaciones. Por lo tanto, después de la muerte del Rey George (Jared Harris de Mad Men) tendrán que vivir en Buckingham, a pesar de sus deseos de tener otra vida, sus hijos utilizarán el apellido Windsor en lugar de Mountbatten de Felipe. La serie cuenta con estos deliciosos detalles de los cuales es la monarquía acompañados de destellos del universo.

The Crown es suntuosa. El vestuario es imprescindible para las mejores escenas. El vestido de novia de la reina, sólo para dar un ejemplo, fue copiado fielmente del original. Seguimos a la nobleza desde su más intimo entorno, vemos que son humanos, somos testigos de los agentes de uniforme almidonado y un viaje a África. Hay rumores palaciegos en casi todas las escenas. La Princesa Margaret (Vanessa Kirby) se enamora de un hombre casado, Peter Townsend. El Duque de Windsor (Alex Jennings).

La serie es extraordinaria en todo, ya que la dirección es impecable, la ambientación es digna de admirar tanto en su realización como en su espectacular banda sonora, el guión un ejemplo, las interpretaciones muy equilibradas dentro de una categoría superior. El reparto es enorme en sus interpretaciones, pero hay que destacar a John Lithgow interpretando a un Winston Churchill impresionante y que ya le valió una nominación a los Critics’ Choice Awards.

The Crown no es un biopic de la Reina Isabel II, va más allá, nos muestra la vida de palacio. Algo con lo que todos hemos fantaseado pero nunca hemos podido ver. Es una serie imprescindible si gusta de las intrigas políticas, escándalos, luchas por el poder, todas ellas reales e históricas.

La primera temporada de The Crown se puede ver íntegramente en Netflix.