[REVIEW TEMPORADA 3] ‘La Casa de Papel’: El apoteósico regreso de la resistencia
Algunos creerán que no, pero las casualidades pueden existir. Ese tipo de cosas a las que no se les tenía suficientes esperanzas terminan convertidas en bombazos inesperados.
Emitida por el canal español Antena 3. La Casa de Papel tuvo discretos índices de sintonía que hicieron que la producción no fuera más que una buena historia que pasó por televisión. Pero fue Netflix quien vio en ella una llamativa circunstancia que podría funcionar en su plataforma. Apuesta que ni ellos mismos pensaron en el hitazo que logró ser.
«La serie en lengua no inglesa más vistas de Netflix» fue suficiente para que se decidiera continuar la historia aunque, en el final de la segunda temporada, ya no había motivos para continuarla… Pero los hubo.
Tuvimos acceso a los tres primeros episodios de esta tercera temporada (o «parte», cómo está publicitada) y nos encontramos con todos los personajes repartidos en Argentina, Panamá, Tailandia, etc. Todos disfrutando de su enorme botín y, por supuesto, escapando de la Europol. No es más que por un pequeño descuido que todo deja de ser color de rosas: Río (Miguel Herrán, pareja de Tokio (Úrsula Corberó), es capturado por la policía y puesto a disposición de las autoridades internacionales. Ella inmediatamente acude al Profesor (Alvaro Monte) en busca de ayuda y así es como todo el grupo se junta nuevamente para lograr la misión que, al parecer, cruzará toda la temporada: rescatar a Río.
Claro. El grupo de atracadores han sufrido bajas de sus integrantes que ya algunos originales no encuentran con ellos. Es por eso que El profesor junta a otros atracadores con el fin de que cada uno tenga una función específica y así lograr el mayor atraco en la historia de España (sí, más grande que el ocurrido en la casa de Moneda y billetes). Ahí es donde destacan «Palermo», «Marsella» o «Estocolmo» (A quién conocimos previamente como Monica Gaztambide). Este nuevo atraco es la excusa para desviar la atención de todos y así lograr el rescate de Río… o, al menos, eso es lo que nos quieren hacer creer.
Ahora convertida en una serie original de Netflix de tomo y lomo. La Casa de Papel no escatima en ser atractiva visualmente, se nota un aumento en el presupuesto y los escritores lo saben mostrándonos diversos lugares del mundo para hacerla más grandilocuente. Pero su alma es la misma: Un grupo de atracadores ingresa a un lugar para obtener el botín. Claro que, ahora, los motivos son distintos.
Lo más criticable de esta nueva temporada podría ser que dejamos un poco el lado la «terrenalidad» del primer atraco (Los atracadores no tenían más recursos que las propias ocurrencias del profesor) a una tercera temporada que desborda opulencias por todos lados. Ya, ok, los atracadores cuentan con millones de euros en su poder para comprar armas o diversos «implementos aéreos» para lograr su cometido. Pero uno de los sellos de La Casa de Papel es que todo lo que ocurriera fuera más llevado a nuestra realidad.
Muchos podrán decir que «chiste repetido sale podrido», y están en todo su derecho de expresar estas opiniones, pero lo cierto es que la tercera temporada de la serie entretiene al mismo nivel de lo que fueron sus dos entregas pasadas. Veremos, con el pasar de los episodios, cómo se desarrolla este nuevo atraco y si se logra mantener el espíritu que cautivó a todo el mundo. Lo cierto es que la serie tiene un futuro extenso ya que se confirmó un cuarto año de ocurrencias.
¿Dónde ver La Casa de Papel?
La serie está disponible en Netflix.