En 2017, HBO estrenó Big Little Lies, un drama sobre la violencia doméstica y la hermandad, llevado a cabo por un elenco femenino de alto perfil. Por último, en vista de su innegable éxito de crítica y público, la serie de David E. Kelley, adaptada de la novela homónima de Liane Moriarty, obtuvo una segunda temporada en 2019, marcada por la llegada de Meryl Streep en su reparto. Si el showrunner está satisfecho con el final feliz de Big Little Lies, las mujeres de Monterey no lo toman de la misma manera.
En una entrevista con la revista Marie Claire, Nicole Kidman, la intérprete de Celeste Wright en la ficción, planteó una vez más la posibilidad de un tercer año. De hecho, la actriz ha estado en contacto de sus colegas de la serie (Reese Witherspoon, Zoë Kravitz, Laura Dern, Shailene Woodley), que desean trabajar juntas de nuevo en el futuro. De hecho, los miembros de Big Little Lies ya han hablado de un posible plan para regresar a Monterey:
«Estoy en contacto regular con Reese, nos escribimos por lo menos una vez a la semana. Se acaba de mudar a Nashville y nos hemos mantenido muy unidas. Realmente queremos trabajar juntos de nuevo. También hablé de ello con Zoe y Laura y están a bordo. Nuestros escritores, David y Liane, han pensado en algunas ideas para la tercera temporada. Hay mucho que pensar».
Por supuesto, parece extremadamente complicado en el papel reunir a las cinco mujeres, que son estrellas de Hollywood y rebosantes de proyectos. La segunda temporada de Big Little Lies también pareció concluir buena parte de los argumentos de la serie, ya que Celeste obtuvo la custodia de sus hijos, mientras que Madeline renovó sus votos con Ed, Jane salió con Corey y Bonnie finalmente decidió ir a la policía por el asesinato de Perry. Por supuesto, las consecuencias de tal confesión podrían hacer que el tema de una potencial 3ª temporada y revivir la ciudad de Monterey.