[REVIEW] ‘Kingdom: Ashin of the North’: El inicio del caos

Todos los fans estaban esperando la fecha de estreno de Kingdom 3, uno de los dramas de zombis más populares de los últimos años. Pero mientras esperamos la temporada, tuvimos a Kingdom: Ashin of the North; un episodio especial de larga duración que promete arrojar más luz sobre el origen de la planta de resurrección y la horda de zombis que engendró, invadiendo la Corea de finales del siglo XVI y socavando el equilibrio sociopolítico de la nación.

Y así es como nos acercamos con curioso anhelo al especial de noventa minutos dedicado a Ashin, la misteriosa mujer interpretada por la estrella coreana Jun Ji-hyun que causaba estragos en la aparente conclusión de las aventuras del príncipe heredero Lee Chang, en el cliffhanger del final de temporada de Kingdom 2.

Ashin of the North toma esa provocación y la reduce a su mínima expresión, desandando la historia de Ashin desde su infancia para darnos a conocer un inexorable camino de venganza que ahora sólo esperamos que se desarrolle plenamente en la tercera temporada de Kingdom. El especial de Netflix es, pues, en efecto, una precuela de la primera temporada, que también tiene la tarea de introducir formalmente el descubrimiento de la planta de resurrección y la mitología que hay detrás.

Sin embargo, al mismo tiempo, la historia de Ashin es el punto de entrada perfecto para aquellos que desconocen por completo Kingdom, lo que hace que este especial sea disfrutable para cualquiera, dada su naturaleza de precuela que permitirá a los recién llegados acercarse a las aventuras del príncipe heredero Lee Chang y a la amenaza de los muertos vivientes al reino de Joseon con más información.

Aunque la primera serie coreana de Netflix nos ha acostumbrado a incesantes e insaciables hordas de muertos vivientes, Ashin of the North en su primera mitad resulta ser en realidad un drama sociopolítico en toda regla, mostrando todos los contrastes e injusticias que surgen de la lucha por el poder y el mantenimiento del mismo; un poco como el cuadro social que se desprende de las primeras temporadas de Kingdom, donde el ascenso de los muertos vivientes resulta ser casi una consecuencia de la injusticia otorgada por los poderosos.

La invasión japonesa del sur de Joseon ha socavado la fuerza de la región, y los pajeowi, una tribu jurchen de las llanuras de Manchuria en el extremo norte de la región, suponen una amenaza real ahora que las fuerzas militares de Joseon se están debilitando. Se decidió mantener como punto de equilibrio a un clan de Seongjeoyain, que vive en el Jeoseon desde hace más de un siglo. Esta población vive en una burbuja de intolerancia, al ser formalmente jurchen y, por tanto, considerados traidores por sus vecinos manchurianos del mismo nombre, y son de hecho parias a los ojos del Jeoseon, donde se les ha permitido residir.

Ashin forma parte de esta delicada comunidad atrapada entre dos fuegos, y pronto se enfrentará a los equilibrios políticos que regulan la vida en la frontera, lo que marcará el fin de la inocencia de Ashin después de que el descubrimiento de un grupo de jurchen asesinados en una zona prohibida haga saltar la mecha del desastre. La diferencia con la serie principal está aquí representada por el hecho de que la protagonista es a todos los efectos una antiheroína atrapada en el desarrollo de su personalísimo proyecto de venganza.

Aunque las atmósferas de terror y las escenas de acción se materializan sobre todo después de la primera hora, Kingdom: Ashin of the North se revela como una obra integral que logra combinar un guion redondo -no exento de fallos, sobre todo en la exposición de la realidad sociopolítica- con una puesta en escena que quizá no alcance el esplendor de la serie regular, pero que sin duda está a la altura y convence plenamente por la variedad de escenarios, la acertada fotografía en los planos y en la paleta de colores y por algunas florituras de dirección que enfatizan los momentos de actualidad. Todo ello se ve reforzado por una excelente escenografía y un vestuario aún más sorprendente que revela el cuidado puesto en el proyecto.

Kingdom: Ashin of the North es una operación inteligente y exitosa. Por un lado, es un gran punto de entrada para los recién llegados a la primera serie coreana de Netflix; por otro, es una extensión de la narrativa que añade piezas importantes a las escenas finales de la segunda temporada, proyectándolas en un horizonte más amplio que podría dar un nuevo respiro a la serie regular. A todo esto hay que añadir una rigurosa puesta en escena y una atención al detalle que, combinada con la excelente interpretación del reparto y un guión convincente que, sin embargo, tiene algunos fallos, hace de este especial una adición bienvenida al canon del Reino.

¿Dónde ver Kingdom?

La serie y su episodio especial están dosponibles en Netflix.