[REVIEW TEMPORADA 2] La innecesaria continuación de ‘Homecoming’

¿Realmente había necesidad de una continuación directo de una de las propuestas más intrigantes del catálogo de Amazon Prime Video? De hecho, la primera temporada de Homecoming terminó de una manera que nos atreveríamos a definir como poética: por un lado, de hecho, la protagonista – una suntuosa Julia Roberts – encontró un cierre personal e íntimo a su trabajo en el misterioso grupo Geist, mientras que por otro lado, el destino de los responsables del malvado experimento llamado «Homecoming» fue castigado y dejado a la imaginación.

Todo esto entonces enmarcado por la sublime y peculiar dirección de Sam Esmail, siempre dispuesto a experimentar con su virtuosismo e infinitos juegos de perspectiva. De aquí surgió la duda que nos ha acompañado en los últimos meses, creciendo junto con la información y finalmente con el trailer, incapaz de apaciguar nuestras perplejidades. Una lástima, porque sobre el papel Homecoming 2 parecía ser uno de los lanzamientos en Amazon más prometedores de mayo. Pero, después de verla, nos sentimos confiados de que esta nueva temporada, estrenada el 22 de Mayo en la plataforma, no era necesaria. Al contrario, era tan complicado estropear una pequeña joya maravillosa como Homecoming.

La trama no difiere mucho del de la primera temporada a nivel temático: se nos presenta inmediatamente a la nueva protagonista, interpretada por una esplendida Janelle Monae, que se despierta en un bote en medio de un lago. La mujer no recuerda absolutamente nada, ni quién es, ni cómo terminó en tal situación; ni siquiera conoce la voz del teléfono que la despertó ni al misterioso individuo de la orilla, que huyó inmediatamente después de su despertar. Las pistas son mínimas: las llaves del auto y algunos documentos, pero todo le parece extraño.

Una sola pista emerge claramente, un frasco perteneciente al grupo Geist y a la enigmática sustancia roja, cuyos efectos son ahora bien conocidos. En resumen, la trama gira una vez más en torno a una amnesia críptica que hay que descifrar a toda costa, e incluso la propia estructura de la temporada parece similar a la del debut de 2018, como la renovada bifurcación en dos líneas temporales, aunque mucho más juntas. Un todo que, sin embargo, comienza a colapsar de inmediato.

La amnesia en sí misma no es el truco narrativo más fácil de usar, ya que es muy probable que se encuentre con algunas inconsistencias o agujeros en la trama y, sobre todo, dificulta que el espectador sienta empatía con el personaje afectado. Por otro lado, una protagonista que sufre de amnesia es un lienzo en blanco, desprovista de una personalidad real y, en consecuencia, debe ser el misterio que rodea su condición el que apoye la trama por un tiempo.

En la temporada anterior los ritmos subían y bajaban en paralelo, cada descubrimiento tenía un efecto concreto en la otra línea de tiempo, el personaje con amnesia se sometió indirectamente a una profunda caracterización y el enigma se convirtió en un mosaico que se recompuso a través de pistas, indicios, conversaciones telefónicas y detalles. Por separado representaban visiones incomprensibles y descontextualizadas, pero al mismo tiempo daban vida a un extraordinario thriller de investigación con una deriva psicológica perturbadora.

En esta segunda temporada, sin embargo, no sucede nada similar; a pesar de la base, la narración es extremadamente más lineal y sin ningún tipo de parpadeo o inventiva, obligando al espectador a seguir un personaje amorfo – cuyo origen de la amnesia ya se conoce – hasta que es transportado a un flashback a mitad de la temporada.

Es extraño decir que el final de la temporada sorprende tanto por su cierre efectivo como por una puesta en escena digna y experimental. Una luminosa excepción que hace aún más triste la oscuridad creativa de esta temporada, porque es independiente de los acontecimientos de la protagonista. Parece una paradoja, pero ninguno de los nuevos personajes tiene el más mínimo impacto en la historia principal.

La segunda temporada de Homecoming adquiere así los rasgos grotescos de un derroche de material narrativo, ya que casi todo lo que sucede no tiene repercusiones en el final, y habría bastado con centrarse simplemente en un personaje específico, quizás haciendo un episodio especial durante una hora más o menos, para terminar la historia con dignidad y pleno sentido. No es imposible llevar adelante un proyecto que ya parecía cerrado al principio, pero por desgracia no es así.

¿Dónde ver Homecoming?

La dos temporadas de la serie están disponibles en Amazon Prime Video.